Díaz, quien conduce un gremio que solicitó un básico docente de $5000, mientras que el salario mínimo fijado ayer para el denominado “cargo testigo” ascendería hacia fin de año a $3.416, cargó también contra el hecho de que el incremento sea en tres tramos: de marzo a agosto, $3.248 (16% de aumento), de septiembre a noviembre, $ 3.332 (19%) y de diciembre a febrero de 2014, $ 3.416 (22%).
“No es facultad del gobierno nacional indicar en cuántas cuotas debe otorgarse un aumento. Eso lo debe decidir cada provincia”, indicó el también secretario de Políticas educativas de la CGT moyanista.
“Nosotros calculamos cuál debe ser el salario básico de un docente en base a la inflación real, no la del Indec, y por lo tanto percibimos el evidente deterioro de la capacidad adquisitiva del salario desde el 2007. Las cuentas son claras. No se puede negociar “a la baja”, porque los mismos docentes nos piden que la peleemos, que no bajemos los brazos”.
Y añadió: “Por eso no entendemos a los dirigentes que adoptan actitudes de sometimiento. No sabemos si es por falta de convicciones o porque los guían otro interés que no es la defensa de los trabajadores”
Asimismo Díaz pidió a la Presidenta Cristina Fernández que actúe con “debidamente informada y consciente de la realidad que atraviesan los docentes. Tenemos que recuperar el derecho social a la educación, y con los maestros mal pagos o escuelas deterioradas, la educación pública naufraga irremediablemente”.
Fuente: http://www.udocba.org.ar/